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jueves, 20 de febrero de 2014

Instituto Oftalmológico Hoyos. La vista. La visión en edad escolar.



Una deficiencia visual puede ser la causa de un retraso escolar en nuestros hijos. La visión se desarrolla desde el momento del nacimiento hasta los 8 años de edad. Los controles visuales, que podrían causar una deficiencia visual permanente si no son tratadas a tiempo.

¿Cuáles son las deficiencias visuales más frecuentes?
Las alteraciones visuales más propias de la edad infantil se refieren a los defectos refractivos, el estrabismo y el ojo vago. Más graves son las anomalías congénitas como las cataratas y el glaucoma que si no se detectan en los primeros meses de vida ocasionan una perdida grave de la visión.

¿Cuándo debe ir el niño al oftalmólogo?
Cometemos el error de pensar que no debemos acudir al oftalmólogo hasta que el niño sepa leer, pero para entonces ya tiene 6 ó 7 años y está prácticamente terminado su maduración visual, edad en la cual la rehabilitación visual ya no es tan efectiva. La primera revisión se recomienda a los 3 años de edad. Pero la atención oftalmológica deberá ser más precoz cuando existen enfermedades hereditarias en la familia o cuando los padres detectan alguna alteración ocular o visual.

¿Qué tipo de enfermedades detectamos en las revisiones periódicas?
A los 3 o 4 años de edad ya podemos determinar la agudeza visual en los niños, con símbolos o dibujos especiales, que nos permiten controlar su evolución y diagnosticar una deficiencia visual en uno o los dos ojos. Los defectos de refracción deben ser diagnosticados por el oftalmológico, con gotas que neutralizan la acomodación natural de los niños y que podría estar enmascarando el cuadro visual. Son aconsejables las revisiones periódicas cada 2 ó 3 años, si el niño no presenta síntomas y anuales cuando existe alguna alteración visual.
¿Cómo podemos prevenir la salud visual de nuestros hijos?
Además de realizar controles oftalmológicos periódicos, debemos educarles sobre la correcta distancia de lectura y escritura, proporcionarles una iluminación adecuada en sus tareas de estudio y controlar el tiempo de juego con ordenadores, consolas y vídeos, facilitándoles entretenimientos al aire libre.